Por Alanna Durkin Richer y Eric Tucker - The Associated Press
El FBI ha fallado a la hora de reportar todos los casos sospechosos de abuso sexual infantil a las agencias policiales apropiadas, a pesar de los cambios impulsados tras su criticada gestión del caso contra Larry Nassar, exmédico del equipo estadounidense de gimnasia, según concluye una auditoría de la Oficina del Inspector General del Departamento de Justicia publicada este jueves.
Tras una revisión de más de 300 casos en 2021 y 2023, el inspector general no halló pruebas de que el FBI cumpliera con los requisitos obligatorios de informar a las fuerzas de seguridad locales en cerca del 50% de las ocasiones. Cuando la agencia sí hizo un informe, sólo en un 43% de ocasiones lo hizo dentro del período de 24 horas que es requerido por la política del Departamento de Justicia.
En un caso, el FBI no tomó las medidas de investigación apropiadas durante más de un año después de recibir una denuncia de abusos por parte de un delincuente sexual registrado, según el informe. La persona fue acusada de abusar de al menos otra persona durante 15 meses mientras la agencia no actuaba adecuadamente, agregó.
La investigación detectó numerosos problemas en la gestión de la agencia federal de las acusaciones de delitos sexuales a menores; el inspector general señaló 42 casos en los que encontró motivos de preocupación, entre ellos algunos en los que no había pruebas de que la agencia hubiera tomado medidas de investigación recientes.
Un alto funcionario del FBI reconoció que la agencia ha cometido errores en la investigación de delitos a menores, pero afirmó que la “gran mayoría del trabajo” se maneja adecuadamente. El oficial, que informó a los periodistas bajo condición de anonimato en virtud de las normas básicas establecidas por el FBI, dijo que la agencia ha puesto en marcha políticas y procesos para seguir mejorando porque “ésta es una misión sin posibilidad de cometer fallos”.
“Garantizar la seguridad de los menores no es sólo una prioridad del FBI; es un deber solemne que nos comprometemos a cumplir con los más altos estándares”. Los esfuerzos del FBI para combatir los delitos contra los menores se encuentran entre las tareas más críticas y exigentes que realizamos”, dijo el FBI en un comunicado.
Aun reconociendo errores, el oficial del FBI citó la “abrumadora” carga que pesa sobre los agentes encargados de investigar los delitos a menores, dada la conducta de la que se trata, la afluencia de pistas que llegan, el aumento del uso de tecnología encriptada para ocultar los delitos y los recortes presupuestarios de la agencia.
El informe sigue a una investigación del inspector general del Departamento de Justicia sobre la gestión por parte del FBI de las acusaciones de abusos sexuales contra Nassar. Dicha gestión concluyó que el hecho de que la agencia no investigara con prontitud las acusaciones contra Nassar le permitió que siguiera abusando de víctimas durante meses antes de su detención en 2016.